El ritual del fuego, la importancia olímpica del olivo y la magia de la «San Antón»

El fuego es para la Carrera Urbana Internacional «Noche de San Antón» lo que los aros unidos y la llama olímpica para unos Juegos. Porque la atmósfera única que propician las miles de antorchas con las que un público entregado acompaña a los atletas en sus últimas cabalgadas hasta la meta es uno de los símbolos más reconocibles de una carrera que este año llega en su nueva versión 10K. El fuego, fuente de vida y de destrucción, símbolo dual por antonomasia al reunir los polos antagónicos del bien y del mal, representa además el vínculo eterno existente entre la prueba y las tradicionales lumbres de San Antón.

La carrera fue concebida y se celebró por primera vez en 1984, bajo la denominación de Cross Popular, con el propósito de impulsar la tradición. Y la unión para siempre entre la prueba deportiva y la fiesta religiosa que entronca con rituales profanos vinculados con el paso de las estaciones o con las labores agrícolas, y que, como todo tipo de ceremonias y rituales celebrados desde tiempos inmemoriales en toda la cuenca del Mediterráneo, gira en torno a las hogueras, se selló con una alianza de fuego.

Desde entonces, el fuego dejó de prender únicamente en las lumbres para hacerlo también ya en las antorchas que se repartían, y reparten, con motivo de la carrera. La analogía con la historia de la ya citada llama olímpica y con su versión, portable, la antorcha olímpica, es más que evidente.

La llama olímpica está vinculada al antiguo mito de Prometeo, al que conmemora por el robo del fuego de los dioses y su posterior entrega a la humanidad. Sus orígenes se remontan a la antigua Grecia, donde se mantenía un fuego ardiendo en las sedes de celebración de los Juegos Antiguos. El fuego fue reintroducido en Amsterdam 1928 y desde entonces ha sido parte fundamental de las citas olímpicas modernas. Sobre todo a partir de Berlín 1936 y del primer viaje de relevos para transportar la llama olímpica desde Olimpia hasta la sede de los Juegos. El propósito era unir los juegos antiguos con los modernos y subrayar la profunda conexión entre los dos eventos. Justo lo que venimos haciendo aquí, desde hace casi 4 décadas, cada vez que celebramos las fiestas de «San Antón», hoy día, por cierto, declaradas de Interés Turístico Nacional. Y así como en Olimpia el fuego pasaba de la llama eterna a la antorcha olímpica (cabe recordar aquí que la primera fue una rama de olivo en llamas y que el diseño de la de Atenas 2004 tiene forma de hoja de olivo), en Jaén lo hace, y nos encanta la metáfora, de las lumbres a las antorchas que aportan luego magia a la carrera. El ritual del músculo y el fuego.

En el siglo XV, el alcaide de la ciudad Miguel Lucas de Iranzo, condestable de Castilla y valido del rey Enrique IV de Castilla impulso la fiesta religiosa. Esta fiesta se consolidó en la ciudad en el siglo XIX gracias a los agricultores y ganaderos que tomaron la costumbre de quemar durante las mimas los restos de las podas invernales.

Así lo relata Rafael Martinez el autor del Libro San Antón 35+:

«El cenicero de la Primera edición»

Jaén 1984, el ayuntamiento somete a sus ciudadanos a un experimento. Unos lo harán como espectadores y otros como protagonistas. Se trataba de correr de una lumbre a otra en la noche del 16 de enero. Para mi es un recuerdo edulcorado en blanco y negro. Pude ver los juegos olímpicos y a Abascal (el atleta) colgarse el bronce en los 1500 metros. Cuatro años después correría la San Antón.

Conocen la historia. Nos la recuerdan los meios cada año. Lo que quizá no sepan es que a Eva Cazalilla, la chica que ganó en categoría femenina, le dieron de premio un pequeño cenicero. Si, para verter la ceniza del cigarro mientras se fuma. Lo normal de una atleta después de correr, vamos.

Todo esto después e que ciertos neandertales de la época al paso de las pocas mujeres que corrían les recordasen lo amplia que era la cocina.

El iluminado de elegir ese «trofeo» supongo que sería un gran aficionado al cine negro. El ayuntamiento puso remedio y al año siguiente zanjó el asunto: igual trofeo, igual remuneración y 12.000 pesetas para ambos vencedores. Fué lo que se cobró por ganar. La edición número 37 de este experimento se celebrará muy pronto. Sin duda, se ha mejorado la fórmula. Los neandertales han evolucionado a sapiens. No todos…

Pero no me digan que el regalo de la primera edición para la ganadora, no es historia. Ya sí.

También adjunto un enlace a un capitulo de este interesante libro:

San Antón 35 +

Entrevista en el programa de Jose Luis López, «Deportemania» de Onda Jaen, a Rafael Martinez Fuentes para mostrarnos su libro «San Anton 35+».

EL OLIVAR Y LOS JUEGOS

El olivo, como el fuego, también ha desempeñado siempre un papel esencial en los juegos olímpicos. Los primeros vencedores olímpicos, por ejemplo, recibían una corona de olivo y una retribución en aceite de los árboles sagrados que eran símbolo de victoria y riqueza. El primero en lucir una fue el griego Korebo en el año 776 a. C., tras imponerse, precisamente, y ya que hablamos de la «San Antón», en la modalidad de carrera. La tradición fue recuperada varios siglos después en Atenas 2004. No podía ser en otro sitio. La ciudad que debe su nombre a Atenea, la diosa que nació de la frente del mismísimo Zeus y que ganó su conflicto con Poseidón, el dios de los mares, con quien rivalizó por su patronazgo, porque brindó a sus pobladores «el mejor regalo posible»: el primer olivo.

Y los jiennenses sabemos entender como pocos el verdadero significado del «Rey de los Árboles», que dirían los romanos, o del árbol «que no es de oriente ni de occidente», que refleja el Corán, como «el mejor regalo posible». Porque, como aquellos griegos que fundaron los Juegos, en Jaén también tenemos claro que el olivo es símbolo de fertilidad, resistencia y eternidad. De trabajo duro y de permanencia. Y, cómo no, de gloria. La que consiguió Korebo y la que esperan lograr los casi 14,000 corredores y corredoras que participarán el sábado en la 37 Carrera Urbana Internacional «Noche de San Antón» Caja Rural. Una prueba que, este año, con su nuevo recorrido ampliado y homologado, y ya incluida en el calendario Nacional de la Real Federación Española de Atletismo, también aspira a entrar el Olimpo de las mejores 10K de este país.

Lumbres de San Antón

En la ciudad se encienden decenas de lumbres, sobre las que se coloca un muñeco realizado con ropa vieja, paja y serrín, además de petardos que explotan con el fuego. Alrededor de las hogueras los vecinos cantan melenchones y comen rosetas, calabaza asada, morcilla, chorizo y vino de la tierra.

Las hogueras están íntimamente relacionadas con el cultivo del olivo y la poda del mismo tras la recolección de la aceituna. Siendo los restos de poda el material fundamental de las hogueras. Antiguamente, se añadían los capachos de esparto que quedaban inservibles tras prensar la aceituna para extraer el aceite de oliva, siendo estos un excelente combustible para las lumbres. En otros tiempos, las lumbres tenían connotaciones mágicas. Con ellas, se ahuyentaban enfermedades y plagas.

Día es de San Antón,

ese Santo señalado,
cuando salen de Jaén
cuatrocientos hidalgos;
y de Úbeda y Baeza

se salían otros tantos.

Extraído del romance De la prisión del obispo don Gonzalo.

¿Quien a ganado está carrera anteriormente?

En esta tabla os mostramos los vencedores y vencedoras de esta prueba de atletismo internacional.

AÑO / MASCULINO / FEMENINO
2019 Mohamede Abdelsalam – Carolina Robles
2018 Carles Castillejo (España) – Nazha Machroh (Marruecos)
2017 Carles Castillejo (España) – Nazha Machroh (Marruecos)
2016 Sebastián Martos (España) – Jacqueline Martín Álvarez (España)
2015 David Solís Luengo (España) – Esther Hidalgo García (España)
2014 Antonio Jiménez Pentinel (España)  – Saida el Medhi (Marruecos)
2013 Antonio J. Pentinel (España) – Esther Hidalgo (España)
2012 Sebastian Martos (España) – Esther Hidalgo (España)
2011 Cubert Nyasango (Zimbawe) – Soud Kambouchia (Marruecos)
2010 Anmanuel Messel (Eritrea) –  Marisa Barros (Portugal)
2009 Isaak Shibatu (Eritrea) –  Fortuna Zegergish (Eritrea)
2008 Yonas Kifle (Eritrea) – Marta Dominguez (España)
2007 Tadesse Zarsenay (Eritrea) – Habtemarian Nebiat (Eritrea)
2006 Jose Rios (España) – Marta Dominguez (España)
2005 Tadesse Zarsenay (Eritrea) –  Carla Sacramento (Portugal)
2004 Rui Silva (Portugal) –  Marta Dominguez (España)
2003 Isaac Viciosa (España) –  Carla Sacramento (Portugal)
2002 Alberto García (España) –  Carla Sacramento (Portugal)
2001 Alberto García (España) – Leah Malot (Kenia)
2000 Manuel Pancorbo (España) –  Hareg Sidelill (Etiopia)
1999 Manuel Pancorbo (España)  – Kennet Georgis (Etiopia)
1998 Isaac Viciosa (España)  – Kennet Georgis (Etiopia)
1997 David Chelule (Kenia) –  Kennet Georgis (Etiopia)
1996 Joseph Kimani (Kenia)  – Lucia Subanu (Kenia)
1995 Moses Tanui (Kenia)  – Delarte Tulu (Etiopia)
1994 Willian Sigey (Kenia)  – Albertina Dias (Portugal)
1993 Paul Bitok (Kenia)  – Yelena Romanova (Rusia)
1992 Willian Koech (Kenia) – Rosa Mota (Portugal)
1991 Ossoro Ondoro (Kenia) –  Susan Shirma (Kenia)
1990 Jonh Sally (Inglaterra) –  Anne Midler (Gales)
1989 S. Nyambuy (Tanzania)  – Anne Midler (Gales)
1988 Luis Adsuara (España) –  C. Mingorance (España)
1987 J.L.González (España) –  A. Sinovas (España)
1986 J.J.Rosario (España)  – Laura Blanco (España)
1985 J.J.Rosario (España)  – Laura Blanco (España)
1984 J.J.Rosario (España) –  Eva Cazalilla (España)

Recorrido

Como cada año la carrera cuenta con dos (2) recorridos. La carrera A que tiene una distancia de unos 4 km para los jóvenes corredores con edades comprendidas entre los 10 a 14 años. Y la carrera B con una distancia de real de 10 km para los atletas federados y corredores populares con más de 16 años.

Este año la Carrera B tiene un pequeño cambio en el recorrido para tenga una distancia de 10 km. Pasara este año por la calle Virgen de la Cabeza, Calle Fermín Palma y Calle Baeza y luego volverá por la Avda. de Madrid.

CARRERA B – Distancia 10k – Salida a las 20:00

Avda. de Andalucía (dos márgenes), Glorieta de Blas Infante, Avda. de Andalucía (dos márgenes), paso subterráneo, Avda. Ruiz Jiménez (dos márgenes), Avda. de Madrid, Virgen de la Cabeza, Calle Fermín Palma, Calle Baeza, Avda. de Madrid, Avda. de Granada, Plaza de Toros, Puerta del Ángel, Adarves Bajos, Fuente de Don Diego, Ejido Alcantarilla, Senda de los Huertos, Carrera de Jesús, Plaza de Santa María, Campanas, Plaza de San Francisco, Bernabé Soriano, Plaza de la Constitución, Virgen de la Capilla, Rastro, Madre Soledad Torres Acosta, Plaza de los Jardinillos, Millán de Priego, Núñez de Balboa, Sagrado Corazón de Jesús, San Lucas, Condestable Iranzo, Federico del Castillo, Doctor García Jiménez, Sefarad, Alfredo Krauss, Avda. de Andalucía (margen izquierdo ascendente), Glorieta Blas Infante, META: Avda. de Andalucía.

CARRERA A – Distancia 4k – Salida a las 19:00

Avda. de Andalucía (dos márgenes), Glorieta de Blas Infante, Avda. Andalucía (m.d.d.), Paso Subterráneo, Avda. Ruiz Jiménez, Avda. de Madrid, Virgen de la Cabeza, Eduardo García Maroto, Avda. de Andalucía (m.d.a.), Glorieta Blas Infante. Meta: Avda. Andalucía.

La prueba del 2017, sufrió unos pequeños cambios en el recorrido, para hacerla más segura para los corredores y conseguir que la distancia llegue a los 10 km. Ademas se va incorporar finalmente la salida por cajones.

EXPERIENCIA PERSONAL

Por último decir que yo personalmente la he corrido en numerosas ocasiones, no sabría ni decir cuando fue la primera vez, yo tendría aproximadamente 12 o 13 años y en aquel momento estaba en el equipo de atletismo. La corrí unos cuantos años y más tarde me lesioné jugando a baloncesto, así que estuve sin correr más de 20 años. Después, y como la vida da muchas vueltas, retomé en el 2011 mi vida deportiva y comencé a correrla de nuevo.  Así fue hasta hace dos años, que de nuevo por una lesión, tuve que dejar de correr y en esta ocasión de manera definitiva.

Para mi, imagino que como para cualquier otro jiennense, es una carrera verdaderamente emotiva, por el ambiente, por la gente que arropa a los corredores durante todo el recorrido e indudablemente por el fuego de las antorchas. El año para mi más especial fue en 2016 porque corrí con mi marido y para mi vivir esta experiencia junto a él fue aún más emotivo si cabe, el momento de la salida con la música las antorchas y su mano apretando la mía mientras esperábamos que la cuenta atrás llegase a cero fue… no tengo palabras, la carne de gallina. Solo puedo decir algo más si queréis saber que es la SAN ANTÓN, poneos las zapatillas y CORRED¡¡¡¡¡¡

San Antón 2016

San Antón 2016